La cultura de Narva es una cultura arqueológica encontrada en las actuales Estonia, Letonia, Lituania, Kaliningrado (antigua Prusia Oriental), y partes adyacentes de Polonia y Rusia. Sucesora de la cultura Mesolítica Kunda, la cultura Narva continuó hasta el comienzo de la Edad del Bronce, habiéndose extendido aproximadamente desde 5300 hasta 1750 a. C.[1] La tecnología era la propia de cazadores-recolectores, con cerámica relacionada con la cultura de la cerámica del peine, supuestamente de lengua urálica. Recibió su nombre del río Narva, en Estonia.